"Mi vida es estática"
Eso decía a sus amistades un joven Encrespado Melónez.
Pero, cuando acudió al médico -el Colegiado Ciclomotor, de profesión adicto a los diagnósticos y a quien le habían diagnosticado adicción-, el diagnóstico no se hizo esperar: "Usted practica una vida muy sedimentaria, caballero".
Y al poco tiempo, los síntomas: amaneció sin pelo en la cabeza. Pensó que había perdido el pelo, pero lo encontró en la planta de los pies. Los órganos más pesados se fueron acumulando en su esófago, vejiga y piernas. Hasta que, un día, la fatalidad llamó a su puerta. Encrespado se preparó para abrir, pero el corazón le bajó hasta el pie y, al ir a levantarse, se lo pisó y murió en un suicidio involuntario.
El diagnóstico fue tremendo: "suicidio involuntario".
Pero, cuando acudió al médico -el Colegiado Ciclomotor, de profesión adicto a los diagnósticos y a quien le habían diagnosticado adicción-, el diagnóstico no se hizo esperar: "Usted practica una vida muy sedimentaria, caballero".
Y al poco tiempo, los síntomas: amaneció sin pelo en la cabeza. Pensó que había perdido el pelo, pero lo encontró en la planta de los pies. Los órganos más pesados se fueron acumulando en su esófago, vejiga y piernas. Hasta que, un día, la fatalidad llamó a su puerta. Encrespado se preparó para abrir, pero el corazón le bajó hasta el pie y, al ir a levantarse, se lo pisó y murió en un suicidio involuntario.
El diagnóstico fue tremendo: "suicidio involuntario".
14 Comments:
El jarabe eutanásico puede ser una solución para la alopecia siempre y cuando se consulte con la sepulturera de turno; tengo entendido que los efectos secundarios de una sobredosis son espantosamente matusalemicos !
Hola!!
Joder, que gore, tío.
Pero puede ser que se levantase con el estomago un poco chungo..jajja
Poco antes de suicidarse, Encrespado degustó sus amargos pensamientos cuando el cerebro le bajó al estómago y no eran dulces como él pensaba. Claro que al pensar en esto comía más y más hasta que de tanta amargura el corazón prefirió bajar hasta el pié que es donde todos sabemos que se esconde el azúcar.Y así, Encrespado tuvo una muerte salada.
Soy Víctor M. Ganso
poeta sin vocación
necesito tu ayuda
amigo mono, adios.
Lo peor de todo es que, después de leerle, siempre pienso que probablemente es usted un honesto funcionario que se pasa el día revisando expedientes, un pensamiento que me tortura: ¿lo será, no lo será? ¿Será, acaso, un probo traductor de manuales de instrucciones de electrodomésticos?
Mia, tuya, suya.
Algo asi ya me olia yo que podia pasar...se veia venir...
Que el sedimentario señor Melónez amanezca sin pelo en la cabeza entra dentro de lo correctamente político. De él diría Quevedo: Hásele vuelto la cabeza nalga. Lo que ya no es tan normal es que sus orgasmos más pesados se acumulen en el esófago. No me extraña que se auto-mate sin querer. Pobre.
Hay muchismos suicidiados de esos trotando por las calles; el día que renunciaron a sentir su felicidad interior... se convirtieron en zombis voluntarios para arrastrar ostentosamente (con ostentosidad ostentada)su involuntario suicidio hasta la tumba
Es que la tumba es como muy refinitiva en temas serios tratados por personas serias, como mismamente usted y yo
felizahora
Anónimo I:
Caballero, la próxima vez que venga a anunciar sus brebajes de hígado para el pelo, le cobraré el espacio publicitario.
Coma berberechos; hacen daño.
Patry:
Disculpe que no entienda su jerga, pero tengo como 40 años más que usted. ¿Dije años? Quise decir lustros, como lustrosos llevo los zapatos e ilustrado es este blog.
Andrés:
Aquí las historias las escribo yo, que para eso me ha tocado vivirlas en primera persona. ¿Que no me creen? Pregunten a sus vecinos.
Víctor M. Ganso:
Agradezco de corazón
su sincera poesía. Mas
dejaréme de cortesías:
necesito dinero ¡Adiós!
Humísima:
¿Seré yo, señor? ¿Acaso se ha parado usted a pensar cómo la veo a usted cuando salgo del blog de usted?
Daniel:
Lo que no veía yo venir es a usted, ¿Por dónde entró?
Liuva:
Veo que usted concluye que Melónez era un autómata. Creo que no ha comprendido bien el texto. Le invito a hacer un resumen y a un batido de coco.
Anónimo II:
Lo único serio que me queda a mí es la etiqueta del pantalón, y estoy por cortármela, pues me da muchos problemas de cabeza.
Visiten todos Logroño al menos tres veces al día.
Gavanido
Yo diría más, agente Dupond. El diagnóstico fue suicidio involuntario.
Vale, señor des-seriado, pero no se equivoque usted con lo que corta al cortar
felizahora
Me he puesto a pensarlo y me ha dado risa.
Con perdón.
Logroño es muy bonita y cada vez que voy me acuerdo, en serio, de un chiste que me contaba mi padre de pequeño (de pequeño yo, él ya era adulto). Dos que se encuentran:
-¿De donde vienes?
-De Vizcaya.
-Vaya, vaya!,
-¿Y tú?
-De Logroño.
-Caramba, caramba.
Ah, el post, normal. Porque aqui lo genial es normal.
Me las pirro, que en mi idioma significa irse encantado de la vida.
Hizo mal con ir al médico. Si nos analizamos, seguro que somos capaces de curar la mayoría de nuestros males; con optimismo y deseos de gozar la vida, por ejemplo.
Yo creo que no me suicidaría, ni siquiera involuntariamente.
¿Me puse demasiado seria?
Saludos.
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